Cruzando el puente hacia el sur llegamos a la cadena de cerros de Peralillo y Aculeo.
Entre una de sus quebradas, se encuentra Las Tazas, vasijas de piedra se repletan y desbordan de agua cristalina y dulzona, cayendo estrepitosamente después de las lluvias.
Estos cerros tienen una muestra representativa del bosque esclerófilo, el siempreverde. Aquel que soporta bajas temperaturas y largas sequías. El bosque reciliente que nos muestra generoso sus especies nativas como chagual, símbolo de nuestra empresa. También el boldo, litre, peumo, quillay, crucero, quiscos, musgos, helechos, hongos y más.
En verano, Chagual te ofrece servicio de acampada en donde podrás asistir a un magnífico concierto de madrugada, a cargo de las avecitas del bosque, entre ellas mi favorita, la pequeña turca.
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